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Unión Industrial Quilmes

Siguen creciendo las importaciones y el déficit comercial

Las importaciones subieron 30% en octubre y el déficit comercial en el año llegaríaUS$ 7.500 millones. Es el saldo megativo más bajo desde la década del noventa.

Las exportaciones subieron el mes pasado 10,8% pero las compras del exterior 29,5%. Cayeron las ventas al Nafta por los biocombustibles.

El intercambio comercial de octubre arrojó un déficit de US$ 955 millones, frente a una pérdida de US$ 54 millones en igual mes del año pasado. Así surge del relevamiento mensual del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC). Hasta octubre la balanza comercial arroja un rojo de US$ 6.115 millones. Los economistas advierten que el desfasaje entre exportaciones e importaciones es preocupante y se profundizará en los últimos dos meses de 2017. Esperan que el déficit llegaría a los US$ 7.500 millones de en todo el año.

El mes pasado, las exportaciones sumaron US$ 5.241 millones, con un aumento interanual de 10,8%. Sin embargo, las importaciones aumentaron aún mas que las ventas al exterior, subieron el 29,5% hasta los US$ 6.196 millones.

“El aumento del déficit comercial hacia la zona cercana al 1% del PBI es el talón de Aquiles de este modelo de crecimiento con gradualismo fiscal financiado con deuda en dólares y con el intento de bajar de inflación con la tasa”, dijo Federico Furiase, director de Eco Go. ”Este año alcanzará los US$ 6.500 millones. Con un déficit de la cuenta corriente externa de 4% del PBI, el modelo está muy expuesto a shocks externos dada la amplitud del déficit externo”.

Coincide Irina Moroni, economista jefe de Fundación Capital. ”El déficit comercial que sin dudas cerrará el año entre US$ 6.000 y US$ 7.000 millones, el saldo más bajo desde la década del noventa”.

La balanza comercial en los primeros diez meses de año fue de más de tres veces mayor a la que acumuló en igual periodo del 2016 (US$ 1.811 millones). Furiase advierte que el rojo en la balanza comercial podría impactar negativamente en el crecimiento económico. ”Argentina pocas veces pudo sostener un ritmo de crecimiento arriba del 3% con un déficit de la cuenta corriente externa de los niveles actuales , por eso es clave que las cantidades exportadas arranquen para depender menos del financiamiento externo”.

Durante octubre, los principales socios comerciales, tomando en cuenta la suma de exportaciones e importaciones fueron Brasil, China y Estados Unidos. Estos tres países sumados absorbieron 33,4% de las exportaciones de Argentina y abastecieron 58% de las importaciones con Brasil, el saldo deficitario fue de US$ 732 millones de dólares. En tanto, con China el saldo negativo para Argentina fue de US$ 894 millones. Y con los Estados Unidos, el déficit alcanzó los US$ 215 millones.

“La buena noticia es que por primera vez en el año crecieron en cantidades todos los rubros de exportación”, destaca Moroni. ”Es significativa la caída en los envíos al NAFTA, producto de la contracción en las ventas de biocombustibles a Estados Unidos, luego del virtual cierre de este mercado. También se verifica una suba en las exportaciones a la región (MERCOSUR, Chile, ALADI)”, agrega la economista jefe de Fundación Capital.

“Las exportaciones se recuperaron en octubre de un modo importante, fundamentalmente por un retraso en el sector agropecuario”, dijo Fausto Spotorno, economista de la consultora OJF. ”Tendremos un déficit comercial de US$ 7.500 millones este año y es la contrapartida de la entrada de capitales. Los dólares que entran al país por colocaciones de deuda se escapan por importaciones”, sostiene.

Coincide Ramiro Castiñeira: ”Argentina en 2016, gracias al financiamiento externo, logró que no colapsara la economía frente al déficit fiscal, energético y comercial que ya existía. Todos estos rojos se financian hoy con endeudamiento. Pero cuando así sucede las alarmas se encienden”. “Hay que discutir en el nivel de gradualismo de la política económica porque el daño en la macroeconomía es estructural”,agregó el economista de Econométrica ”El año que viene la tendencia será la misma. La única diferencia es que si Brasil arranca, tal vez mejoren las exportaciones a ese país, especialmente las industriales. Pero por el lado del agro, en 2018 no habrá que esperar mucho”, concluyó Spotorno.