El presidente de la Unión de Industriales de Quilmes, Horacio Castagnini, señaló que propondrán al próximo intendente de la ciudad, sea quien fuere el ganador en las próximas elecciones, un proyecto de ciudad inteligente y sustentable que tenga en cuenta las necesidades de crecimiento y desarrollo de las industrias locales.
Al reflexionar sobre la situación del sector, Castagnini señaló que “las industrias de Quilmes, como las de la provincia y el país, han sufrido la crisis económica de los últimos años. Pero las empresas enclavadas en el Conurbano son todas pymes, que proporcionan el 80% de la mano de obra ocupada, y son las que más han sufrido la retracción de la demanda”.
“Esto se debe a que la inflación exorbitante, con niveles superiores al 40%, han provocado la baja del consumo, lo que conlleva a una baja de la producción. Y si baja la producción, los primeros que se perjudican son las pymes, porque la mayoría de su producción es para satisfacer el consumo local”, agregó.
Este mismo sector “ha sufrido una presión tributaria asfixiante: las presiones de la AFIP y ARBA han sido tremendas, y con la política de embargarle las cuentas a las pymes, no pueden pagar los sueldos, no pueden comprar, no pueden vender, y se terminan fundiendo. Así hemos visto casos de empresas emblemáticas, como la papelera Ansabo, o la metalúrgica Eitar de Bernal, que tenía 450 trabajadores y tuvo que cerrar. Son todos quilmeños que quedaron en la calle, y por ende tampoco consumen, lo que provoca una crisis en otras pymes. Todo un círculo vicioso”.
REPRESENTACIÓN
“Al hacer un balance de nuestros últimos años como cámara, debemos reconocer que hemos sido muy reconocidos: el prosecretario de Hacienda de la Cámara Argentina de la Mediana Empresa (CAME) es Carlos Venier, en nombre de la Unión de Industriales de Quilmes; y a mí particularmente me toca estar como prosecretario de la Unión de Industriales de la Provincia, lo que es muy honroso para nosotros”.
En cuanto a la representatividad, “hemos perdido socios como consecuencia de la crisis, sin embargo hemos incorporado a numerosas empresas nuevas de la ciudad, de manera que hemos mantenido la masa societaria. Y creemos que todos estos años hemos representado bien los intereses gremiales empresarios”.
“Hemos trabajado con la Universidad de Quilmes en una alianza estratégica, lo mismo que con el Parque Industrial La Bernalesa. Allí se está instalando el primer Centro de Formación Profesional en una iniciativa conjunta de la UNQ, el PILB, la UIQ y los gremios Unión Obrera Metalúrgica y la UOCRA”, señaló Castagnini.
“Cuando hace años hablábamos de tejer alianzas estratégicas, de estas cosas estábamos hablando, previendo una ciudad que necesita desarrollarse de cara a las nuevas tecnologías, a los nuevos desarrollos”.
FUTURO
En este marco “estamos trabajando para presentarle al próximo Intendente, un proyecto para un ‘Quilmes integrado productivamente: una visión de una ciudad inteligente’. Queremos pensar a una ciudad qué integre el desarrollo industrial pero sin comprometer el medio ambiente”.
“Entendemos que dentro de 10 años todas las industrias de la ciudad deberán estar radicadas en parques industriales, no sólo porque beneficia a las pymes en cuanto a servicios, seguridad, rebajas impositivas, sino también porque permitirán tener una ciudad ordenada, amigable, moderna”, explicó el dirigente empresarial.
“Pensamos que el próximo gobierno tendrá que escuchar a todas las cámaras empresarias, sin banderías políticas, porque nosotros sabemos de lo que estamos hablando. Quilmes es una ciudad enorme: En 2 años va a tener 800.000 habitantes y habrá una necesidad urgente de urbanizarla de manera inteligente, por lo cual considero que hay que relocalizar industrias, impulsar la asociatividad de las empresas locales, y hay que promover la industria local quilmeña”.
“Cuando decimos ‘Compre Quilmes’ no hablamos de que el Estado nos compre una resma de papel, sino de que cuando hace una obra pública de envergadura, que una pyme local no puede hacer, al menos que en los pliegos de licitación establezca la condición de que esas industrias no sólo tomen gente de Quilmes, sino que toda la cadena de valor, todos los insumos sean de la ciudad”, explicó Castagnini.
“Nos cobran la tasa de Seguridad e Higiene sobre la facturación, lo que sostiene casi el presupuesto de la ciudad y que sólo lo pagan las industrias, entonces por lo menos que nos hagan participar de los negocios que genera el Estado a través de la obra pública. Porque si facturamos más, vamos a pagar más tasa de Seguridad e Higiene, en un círculo virtuoso para las pymes, para la municipalidad, y para los trabajadores de toda la ciudad”, agregó.
MEDIDAS
“Los próximos años van a ser difíciles. Para que Argentina vuelva a ser atractiva para nuevas inversiones, va a llevar tiempo. Pero las tasas tienen que ser razonables. No puede ser que la tasa esté a 75%; imposible que una pyme pueda comprar maquinaria para ser competitiva con esos valores”, continuó.
“También a nivel local tiene que haber una política de infraestructura razonable, inteligente, que le permita a las empresas trabajar. Algo tan simple como asfaltar las avenidas de acceso a las empresas, o brindar seguridad en las zonas por donde tiene que circular los transportes de las fábricas”.
“La ciudad tiene que pensarse incluyendo a las industrias y sus necesidades, porque esto también es competitividad para las empresas. El próximo Intendente tiene que tomar en cuenta a las empresas y debe darle estas mínimas garantías para el crecimiento, así pueden darle trabajo a los vecinos de Quilmes”, concluyó.